viernes, 3 de septiembre de 2010

La voz de mi amada toro



Ella es preciosa, todos lo sabéis,  nos escribe con  alma abierta y  mano desenvuelta. Sin anclas que le impidan  hacerle  soltar la emoción que la esté poseyendo  en el momento de hacerlo
 Sus letras desprenden aroma, sabor, textura y, sobre todo, ingenio desbordante. Ingenio alegre,  juguetón, creativo, cariñoso, gamberro, acogedor  y … acariciante. Muy acariciante. Entrar a su blog a conversar con ella es como llegar junto a la gran  gurú de los abrazos: recibes la misma descarga.   

Ofelia disfruta y lo mejor de todo es que consigue emanar  su disfrute de tal modo que se nos instale dentro. Ofelia se debería escribir con haches intercaladas y signos admirativos  ¡¡¡Ohhhhhfelia!!! 

 Ya sabéis que las fotos de sus flores   me hicieron pedirla en matrimonio,  a pesar de tener ya  un  amor, y  de sentirme un vaca  heterosensual, sobre todo  para las  cosas del… ¿cómo decirlo? …follaje, sí eso, del follaje   y del rodaje por bosques y  prados.  Pero a pesar de estas taras mías  me resultaba  imposible  mirar hacia aquella  flor, con aquellas pelusas semitransparentes  dibujando el tacto de la delicadeza más extraordinaria,  sin percibir  esa foto  como la   metáfora de una pequeñísima parte de lo que Ofelia  necesita expresar agolpándose en ella.
 Y, habiendo sentido esto,  el no pedirla en matrimonio,  ofreciéndome a amarla  y cuidarla, o  el no  dejar un comentario en su entrada con  lo que de verdad sentía, me parecía un sacrilegio, un pecado contra el universo que nos confabuló una frente a la otra.
Pues voy,  se lo suelto por  escrito,  y va ella y se ofrece al cambio de sexo, y a ser mi amada toro.  Pordiosquepedazodetía!
Ofelia es así, lo entiende, lo ve   y lo acoge.  ¿Cómo no enamorarse? Lo que no se es como no estáis todos también  haciendo cola para pedirla en matrimonio.

 Ofelia enamora,  borra  lindes  y  sobre ella  refleja   nuestra parte más hermosa.  Creo que si pudiésemos ver sus  neuronas espejo   acabaríamos yendo allí a mirarnos y hablarnos, pero como no podemos… vamos a su blog.

Bueno, pues ayer  conocí su voz,  (aún estoy tambaleándome) .  Durante  horas que pasaron como un instante, tuve el placer de escucharla y de que ella hiciese lo propio conmigo,  y claro, ¿cómo dejar de escribirlo, describirlo, comunicarlo, narrarlo?   Imposible. Pero para  contaros  esto voy a ser muy breve, porque me di cuenta que  una parte de mi corteza cerebral   ya ha podido traducir la metáfora visual que me ha provocado este encuentro telefónico.  y esté es el retrato de lo vivido mientras hablaba con ella

La voz de Ofelia, mi amada toro, combina tanto con el   alma que    nos transmiten sus letras, que escucharla  fue  como presenciar el baile de la luna y las mareas. La voz,  la luna,  las letras ,  el mar,  dejándose llevar por esta. El paisaje una pedazo luna bailando  sobre el océano, reflejos plata sobre el agua que viene y va. 

 Supongo que tener esa voz es lo  normal por tener   el alma que tiene, pero además creo que parte de ese prodigio tiene que ver con los atracones que se mete de jazmines.

Besos mi amada toro,  Enseguida me paso a ver como van los preparativos...mientras te dejo esto.  

 

11 comentarios:

I need a miracle dijo...

Madre mia quién fuese Ofelia, para que le deidcasen tan lindas palbras! O voy más allá, i sigues así me paso al otro bando y me pongo a la cola para pdeirle sea mi esposa...eso si acepta a una divorciada como yo ;)

Preciosas tus palabras mi vaquita preferida, cuando la protagonista de tu entrada lea esto, creo que hasta frío le va a entrar de la emoción y tardará en recuperar el estado normal de su piel.

Besos y feliz fin de semana

Ofelia Gasque Andrés dijo...

Vaca, ¿sabes que la luna estaba celosa porque últimamente solo tenía ojos para tí? Pero es que desde que escuché tu voz, modulada por diamantes y rubíes de transparencia infinita, el Bruce, el Frank, la Morcheeba, el Anthony and the Johnsons, el Betoben y el Bach también se han puesto celosillos, porque sólo tengo oídos para ti.

No sé que va a pasar el día que toque, el día que te pruebe y no digamos el día que te huela¡!¡

Después de haber desnudado tu corazón del modo que lo has hecho, me he quedado sin muuuuído, estoy que rebuzno....me abru-mas¡!¡ Voy a necesitar ingerir una burrada de jazmines para recuperar mi habitual expresión oral y susurrarte, como te mereces, las más acariciantes palabras de amor.

Y bailar? Te voy a bailar el agua, el fuego, la tierra y el aire para que las leyes que rigen los milagros dejen de ser un secreto para nosotras.

Quizás no te hayas dado cuenta, divina rumiante, pero a mi hemisferio cerebral izquierdo no se le ha escapado el numérico detalle de que esta entrada haya sido publicada a las 12:12. Es la puerta de entrada al universo multidimensional que está muy contento de que vayamos practicando con sus agujeros de gusano.

A Si es lo que parece le digo que el amor es libre, que los corazones no conocen el significado de la palabra límite, vaya, que el hecho de que esté divorciada tiene una importancia -25.000 y que, efectivamente, me he tenido que poner el forro polar y el gorro de piel de oveja islandesa.

Me despido de ti sobrecogida y con ganas de cogerte.

Te envío un beso que será engullido por un agujero negro para la creación de un nuevo universo*

Elvira dijo...

Buenoooo, y yo que sin saberlo he hecho de Celestina, jajaja!

Besos a todas

Sonix dijo...

Preciosa entrada... ¡y preciosa respuesta!

Sra de Zafón dijo...

Para mi, la condición de divorciada puede ser un valor añadido al patrimonio personal, es una experiencia de la que si uno quiere se aprende muchísimo, para bien.
Con Ofelia, como conmigo, no hace falta que te pases a ningún bando.

Ay Sies, pues aún te debo a ti una entrada por tu regalo, así que vete preparándote...

Besos,

Sra de Zafón dijo...

Tora, lo sé, lo sé casi todo desde que escuché tu voz...
Deberíamos consultar a nuestros amigos e invitados lo de hacer radio juntas, a ver que les parece...
Besos amada mía, me voy a la cama que mañana me espera un día de libélulas y pétalos y quiero estar fresca.

Sra de Zafón dijo...

Elvira, madrina,
me quedas extraña de celestina,
Tú eres nuestra luz que alumbra el alfeizar que nos invita e incita.
Besos, artista.

Llevo todo el día intentando dejar un comentario en tu última entrada y no me lo permite, no sé por qué, mi conexión está mal, pero no tanto.

Mañana lo intentaré de nuevo, pero que sepais ya tú y tu amiga femme, que siento mucha rabia de no saber plegar el mapa para que Zaragoza linde, aunque sea por un día, con Pontevedra y me ayude en una fiesta, jo! Precioso todo lo que hace, pero al pelo me venían las cosas galácticas, los bosques de hadas y un montón de cositas más.
Besos de muy buenas noches

Sra de Zafón dijo...

Gracias Sonix, el amor es lo que tiene, convierte lo cotidiano en precioso.
Muchos besos

Merche González dijo...

Ay vaquiña!! qué ilusión me ha hecho saber del paso que habéis dado, qué experiencia maravillosa (yo también la he vivido y sé que es fantástica). Tus palabras me han erizado el vello con escalofríos de emocionamor, y la sonrisa ha mojado mis orejas... Os habéis pedido las manos o las pezuñas o lo que gustéis en tener?

Veo la boda inminente en un prado verde al son de gaitas y arpas, adornado con flores de Ohhhhhfelia. Tendré que ir pensando el regalo.

Muchos besos amorosos a las contrayentes
PD: no sé si ponerme en la cola para pedir a tu amada toro o para pedir a la vaca-cabra, en fin, me quedo con las dos.

Sra de Zafón dijo...

Gacias Mr Mc.Donal, te visitaré en breve.
Vienvenido y un abrazo

Sra de Zafón dijo...

Que tú estés y además con esas hermosas dudas, será tu gran regalo.

Besos de buenas noches!