viernes, 30 de enero de 2009

PROMISES


El verano pasado, uno de mis “documentalistas oficiales”, un amigo psicólogo que ejerce de maestro, con una sensibilidad exquisita para abordar cualquier tema, me trajo como regalo una copia del documental Promises.

“Te dejo esto para uno de esos días tuyos de lluvia y sin niños en los que vuelves a entrar en casa…”

En verano vivo en el prado y apenas entro al establo, pero una tarde en que el cielo se volvió de plomo y las gotas de lluvia parecían canicas a punto de romper mis sombrajos, un ataque de melancolía otoñal me hizo hacerme un té y refugiarme en un sofá frente a una pantalla. Así que disfrutando de la invitación del rugiente cielo y envuelta por el decadente aroma de un té bajo una lluvia de verano, me entregué al disfrute del regalo de mi amigo.
.
En la carátula había escrita una frase: "Los niños son buenos detectores de basura y dicen la verdad"
B. Z. Goldberg

Y debajo venía escrito esto:

“En el marco de la situación que se vive en Oriente Medio, PROMISES nos ofrece un retrato humano del conflicto palestino. A partir de los testimonios de siete niños (de 9 a 13 años), conoceremos lo complicado que es crecer en Jerusalén. Aunque los niños viven a sólo veinte minutos de distancia entre sí, habitan en mundos radicalmente diferentes, prácticamente incomunicados, y son conscientes de la situación. Su visión de las cosas está modelada por las imposiciones de los adultos que les rodean. Pero este grupo ha decidido saltar las barreras para encontrarse con sus vecinos.”

Estas navidades, una tarde de sol y frío, después de un largo paseo con buenos amigos volví a verla tomándome otro té y volví a llorar, emocionada por lo que guardan dentro de su corazón los niños, y descorazonada por la imposibilidad de Paz.

Terribles enseñanzas aprendidas bajo el terror, dinamitadas, al menos por un día, por las ganas de unos niños de acoger al otro… al enemigo.

Creo que sólo existe un modo de parar esto, y es dando oportunidad a la convivencia con fuerzas internacionales de paz. Pero quién soy yo para creer nada...


Pego el enlace a la película por si aún no la habéis visto y os apetece, (a ver si de esta queda listo para pinchar)


http://canaldocumental.blogspot.com/2008/04/promises.html

Hace un rato una amiga me dijo que la peli que colgué no está doblada al castellano. Buscándola en por la red la encontré, pero ¡en 10 partes!. Cuelgo aquí el enlace por si alguien pasa por aquí y le apetece verla. Por muchas partes que tenga os aseguro que vale la pena.

Y ahora no me queda esto linkado...ayyyyy.

http://wiki.taringa.net/posts/videos/1978680/%5BDoc%5D-El-conflicto-de-Medio-Oriente-visto-por-los-ni%C3%B1os.html

domingo, 25 de enero de 2009

Binta y la gran idea




Este vídeo es un regalo de una buena amiga. Dura 23 minutos y hace falta encontrar el momento para verlo, pero me apetecía mucho colgarlo aquí.
Dice mucho de las grandes verdades que creemos poseer y de como otros tienen las suyas.
Este cuento es una visión hermosa de como las verdades varían según quien las crea.





Me ha sugerido el colgar aquí esta historia una entrada de Juanjo Albors en su blog

Además de la entrada copio y pego unas palabras suyas:

"Los Defensores de la Verdad son menos dañinos físicamente que los Padres de la Patria pero más dañinos en los espíritus. Son los que han impedido que encontremos nuestras verdades y que las compartamos con las de nuestros vecinos.

Y todos, participando de ese Amor a Dios, a la Verdad, a la Patria, utilizado como objetivo para ejercer el proselitismo y el adoctrinamiento necesarios y convenientes, cueste lo que cueste y caiga quien caiga, especialmente si es de otra religión, de otra raza, de otra frontera.

También incluí una crítica a nuestro Primer Mundo en el que seguimos preguntándonos ¿Dónde está la Verdad? ¿Cuál es la esencia de Dios? al tiempo que defendemos nuestras Patrias de peligros inventados por la Raza y el Dinero, las actuales Grandes Palabras, que permanecen, sin necesidad de mayúsculas, agazapadas en la sombra."

Juanjo Albors

miércoles, 21 de enero de 2009

Se lleva Obama




Me gusta Obama , además de elegante como pocos (últimamente veo muy poca gente elegante) y poseedor de una belleza carismática, en su persona se congregan una suerte de esperanzas casi increíbles en los tiempos que… ¿corrían?

Obama habla de la posibilidad de un mundo en el que muchos creemos, un mundo que depende de la buena voluntad de los hombres y no de la marea que nos quiere arrastrar a la pasividad del ¿qué puedo hacer yo? y la condena al absurdo.

No hace falta que analice sus discursos o enumere las palabras que ya enarbola en su bandera. Todos sabemos de qué dice ir Obama y la ola de esperanza que con ello ha provocado. Y he de confesar que le creo porque necesito creerle. Y he de confesar que temo que de nuevo maten al soñador y al sueño vuelvan a disfrazarlo para intentar vendérnoslo como utopía. También confieso que no le perdonaré unas cuantas cosas como no las lleve a cabo.

Pero hay algo que además de hacerme gracia me da todavía más esperanza:
Obama se lleva, y si no que se lo pregunten a Mr. Hilillos de plastilina , ese señor que hasta ayer se burlaba del calentamiento global y del cambio climático.

Sin adentrarme en lo que este señor y su partido consideran “progreso” me limito a sonreir ante esta noticia:

"Rajoy envía una carta a Obama ofreciendo el apoyo del PP para fortalecer las relaciones entre Estados Unidos y España...

…"Pleno apoyo" de su partido para fortalecer las relaciones entre EE.UU. y España y para "reforzar" el compromiso en favor de la libertad, la democracia y el desarrollo sostenible"

Lo mismo este señor cree que el desarrollo sostenible es la ejecución de la costa gallega que tenían previsto antes del cambio de gobierno...

La puñeta es que Obama no se ha presentado en Galicia y me temo lo peor... aunque quizás caminando por la calle, como los Gipsy Kings, me encuentre a Don Marinano de esta guisa y mis temores se desvanezcan además de morirme de risa. ¡Ay las modas!

Os dedico una canción que nunca pasará de moda en una versión estremecedora.

miércoles, 14 de enero de 2009

Imitanto, malamente, a Elvira



"Pueden amar los pobres, los locos y hasta los falsos, pero no los hombres ocupados." Donne, John




Esta entrada te la dedico, Elvira, con poco tiempo para hacerla pero muchas ganas de mostrártela.
Pego una foto que me me sugirió el beso de tu última entrada, y una frase. También una canción y me quedo con las ganas de escirbir algo más sobre Tarzán y Jane, y su manera de estar en el mundo.

Besos.


lunes, 5 de enero de 2009

Mi Tiempo



Cuando era ternera medía el tiempo en segundos estirados o comprimidos por mis anhelos.
Un tiempo que se expandía eterno desde mis labios a su insoportable ausencia, o que se desvanecía esfumándose en entrega a la pasión, en los breves encuentros con mi querida hierba y otras inconfesables delicattesen.

Las vacas libres, las que pastamos en las praderas, no creemos en los relojes. Esos artefactos que miden el tiempo en tic tacs y que hacen correr de un lado a otro a los humanos. Por eso nunca encontraréis relojes para vacas en el mercado. Tampoco creemos en esa traidora línea que dice marcar el horizonte de nuestro cielo y de nuestra vida, o en que las alpacas tienen el mismo número de nutrientes que la hierba fresca, o que el tacto de una piel humana es lo mismo que unos guantes de plástico, o que desayunar con margaritas provoca el mismo efecto que desayunar con pienso. ¡Supercherías y chismorreos de vaca exclavizada por el falso progreso,nada más!

Pero sí creemos en cercanías y lejanías extemporales y afectivas, en instantes que duran una eternidad y eternidades que duran un instante, en vidas que fueron ayer y que ya estan a años luz de quienes somos ahora y en experiencias pasadas y presentes que arrojan años sobre la piel, o que los restan. Envejecer, rejuvenecer, morir, resucitar y viceversa.

Y aunque nuestra vida parezca discurrir al ritmo de las rojas agujas de los atardaceres, o de los brillantes cambios de las constelaciones sobre nuestros sueños, o del húmedo verde al amarillo paja de nuestro alimento suelo, éstos nada pueden hacer para marcar el tiempo y la edad de una vaca, porque no hay nada en nuestro mundo que pueda marcar un ritmo regularmente, ni en minutos, ni en años, ni en pesados siglos, nada. Porque en cuanto un amanecer nace encendido de ganas, el tiempo deja de existir como tiempo para ser medido en distancia.

Distancias entre:

Mi hierba y yo.
Mi boca y la suya.
Mis cuadros y la sala que los expondrá.
Su mirada y mis ojos.
Mi libros y las primera librerías que los venderán.
Mis palabras y sus oídos
Mis obras y las salas que las estrenarán.
Sus manos y mis caricias.
Sus palabras y mis besos.
Mis caricias de madre y la piel de mis niños.
Sus heridas y mi consuelo.
Mi necesidad de abrazar, o llorar, o reir y los brazos de mis amigos.
Su nuevo dico y mi entrada a su concierto.
La inauguración de su casa y mis vacaciones.
La sal de naranja y romero siciliano y mis ensaladas de verano.

y un montón de cosas más...

Esta claro que para una vaca libre el tiempo es igual a la distancia entre ella y sus praderas, multiplicado por las ganas, o partido por la pereza.

Yo misma he de reconocer que dejé de ser ternera unas cuantas veces, y que en ello tuvo mucho que ver el dejar de medir mi tiempo en ganas, y extraviadas estas, y por temporadas,llegué a convertirme en anciana de mirada de alpaca.

Ahora me encuentro en uno de esos momentos en que, aún no haciendo demasiado caso a mis creencias de vaca libre, ya no caigo en la trampa de intentar medir el tiempo. Ahora sólo intento saborearlo, con o sin ganas, sabiendo que las ganas locas siempre viven agazapadas en la esquina de cualquier amanecer, lo mismo que se prenden de un atardecer para no volver jamás, a no ser que salgas a por ellas y te las traigas bien amarradas, que las ganas son muy veletas y tienen cuerpo de cometa. Y que si me atacan no me quedará más remedio que volver a ser ternera, lo mismo que si me dejan a solas con mi pereza volveré a ser vieja.

Y todo por una foto que hablaba de lejanía en el espacio, no en el tiempo...
Gracias, Juanjo, por este rato de desvarío que me llegó de tu amigo :-) con el ego agradecido, pero entristecido por la lejanía entre él y su foto.

Supongo que a partir de ahora te cuidarás de mantener conversaciones sobre el espacio tiempo con vacas de pradera.